Nosotras, hermanas Teresa Balela Tshituka, Isabel da Costa Xavier y Elizabeth Arockiasamy, Franciscanas Misioneras de María (FMM), vamos a compartiros los momentos que vivimos en nuestra misión, en Montepuez, Cabo Delgado, Mozambique.
Desde el 5 de octubre de 2017, la parte norte de esta provincia ha sufrido los constantes ataques armados de insurgentes terroristas que vandalizan los pueblos y las ciudades incendiando las casas y otras propiedades privadas, matando gente y provocando el éxodo de la población que debe abandonar la región en peligro y buscar regiones de paz. Numerosas familias han huido hacia las ciudades y provincias vecinas buscando seguridad para salvar sus vidas. Los insurgentes destruyen masivamente, incluso las infraestructuras gubernamentales.
Es importante subrayar la inquietud y la desestabilización de la población de la región, que continúa viviendo el éxodo de nuestro tiempo, sin poder alcanzar la tierra prometida. La situación es muy triste, preocupante y angustiosa, se ha vuelto mucho peor este año cuando el mundo entero estuvo llamado a observar las exigencias de la pandemia del Covid-19 y siendo estrictamente necesario seguir las directivas sanitarias del gobierno y de la OMS para evitar la pandemia, fue difícil por no decir imposible. Desgraciadamente, debido a la situación de guerra la gente no ha podido seguir estrictamente estas exigencias. Por lo cual, la mayoría de los infectados por el coronavirus llegan de esta región y la propagación del virus se extiende en otras regiones.
Pero aún quedan personas en la zona de riesgo, por falta de lugares a donde ir, o donde refugiarse, viven siempre llenas de miedo, pasando la noche en la selva, porque la estrategia de los insurgentes es la de atacar varias veces en la misma ciudad o pueblo.
Lo que es absurdo es que la cara del jefe del grupo armado que ataca sea desconocida, incluso del gobierno mismo. No se sabe aún quien está detrás de estos actos. Muchos piensan que son el grupo del “Estado Islámico”, pero la gente de religión musulmana de Mozambique no los conoce.
Es una experiencia dura y difícil para los habitantes de la región. De momento numerosas familias se han refugiado aquí en nuestra misión de Montepuez, pasan hambre y necesitan de todo. Nosotras estamos agradecidas por el gesto que ha hecho nuestro Instituto de las Franciscanas Misioneras de María, por la iniciativa de la Superiora General y su Consejo, y también a nivel Provincial, que han ayudado y continúan ayudando a este pueblo sufriente y sosteniendo a ciertas familias que están en necesidad extrema. Ciertamente, las necesidades son tan grandes que incluso no las podemos ni imaginar. Nuestros medios son limitados, pero confiamos en la Divina Providencia.
Numerosas personas que han emigrado han abandonado y perdido sus casas, algunas han ido a Pemba, Montepuez y otras ciudades y provincias vecinas del país. En nuestra misión franciscana no estamos indiferentes, asistimos y acompañamos a los más necesitados, la ayuda financiera que recibimos la utilizamos para este fin.
VICTIMAS EN CABO DELGADO
En esta situación numerosos jóvenes han perdido la vida por haber rechazado formar parte del grupo terrorista insurgente. Algunos están, obligados a coger las armas y a integrarse, contra su libertad.
LA IGLESIA
Estos últimos días, los insurgentes han atacado a los militares de la marina y han matado a numerosas personas.
Ante todo esto, el gobierno no ha querido nunca comentar la situación que atraviesa la población desde 2017, gracias a la voz del obispo del lugar Dom Luiz Fernando Lisboa, cp. que atrajo la atención de numerosas entidades, hoy es un caso en estudio e investigación.
Compartimos todo esto para que elevemos nuestras peticiones al Señor de la Misericordia para que tenga compasión de su pueblo que sufre,
NUESTRA AGRADECIMIENTO POR EL APOYO A LOS REFUGIADOS
Nosotras, las Franciscanas Misioneras de María de Montepuez, estamos muy agradecidas por la ayuda financiera tan significativa que hemos recibido para tanta gente necesitada, tan vulnerable, víctimas de ataques armados en los distritos de Macomia, Quissanga, Muidumbe, Mocimboa da Praia, Nangade de la región norte de la provincia de Cabo Delgado, Mozambique.
Esperamos que un día acabará esta situación y que la paz volverá. El gobierno trabaja para llegar a ello. Constantemente pedimos la intercesión de la Virgen María, madre de los afligidos y de nuestra fundadora María de la Pasión. Os pedimos oraciones porque la situación es complicada, aquí el barrio de Montepuez cuenta actualmente con más de 35.000 personas desplazadas
Muchas gracias por sostenernos espiritualmente.
Montepuez, 2020
Comunidad Beata María Asunta à Montepuez
